El consumo interno de la carne de ovino y caprino es uno de los grandes problemas con los que está lidiando en los últimos años este subsector ganadero. A pesar de todas las iniciativas puestas en marcha por productores y transformadores para potenciar su consumo a través de nuevos productos, lo cierto es que el consumo en los hogares españoles continúa cayendo en picado.
Los últimos datos interanuales son suficientemente elocuentes. En el periodo de enero a octubre de 2018, último mes del que se tienen estadísticas confirmadas, se ha producido una reducción del 5,9% en comparación con los mismos meses del ejercicio 2017. Por su parte, en el último año móvil entre noviembre de 2017 y octubre de 2018, el consumo de carne de ovino y caprino fresca en los hogares españoles ha caído un 5,6% en relación con el periodo entre noviembre de 2016 y octubre de 2017. Se trata de datos oficiales de la Subdirección General de Estructura de la Cadena Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
Habrá que esperar a la evolución del consumo en los dos últimos meses del año, en su periodo más importante debido a las festividades navideñas, para confirmar si el descenso del consumo sigue en niveles similares al ya citado 5,6%.
Oviespaña, noticias diarias sobre el mercado nacional e internacional del ovino, investigación ganadera, alimentación y sistemas de manejo.