Entrevista a Javier Acosta, responsable del Servicio Técnico de Rumiantes de CEVA
“Los tratamientos de melatonina, los controles productivos y de costes junto con la alimentación son la tendencia del manejo reproductivo del futuro”
Redacción Interempresas29/05/2024
Ceva Salud Animal va a presentar en la próxima edición del FORO OVINO resultados del proyecto TechCARE en el estrés térmico en ovino y la gestión de granjas de un elevado censo de ovejas lecheras, todo ello en el marco de la importancia de la planificación reproductiva para conseguir la rentabilidad en una granja.
Javier Acosta.
Ceva va a presentar en el FORO OVINO un seminario sobre modelos de producción en ovino de leche. ¿Qué papel juega la ordenación reproductiva en una granja de ovino de leche?
Desde el punto de vista de Ceva, pensamos que la ordenación o gestión reproductiva de la granja es el eje central y fundamental que toda granja debe tener planificado y por escrito de cómo, cuándo y qué se debe hacer para tener un funcionamiento estructurado y ordenado, acorde a las necesidades de cada granja y poder llegar a un objetivo marcado para que la granja consiga la rentabilidad. De este eje depende el resto de las funciones y trabajos que hay que realizar en el día a día en una granja de ovino de leche.
¿Qué influencia tiene esa planificación reproductiva en la rentabilidad de una explotación?
Se tiene que llegar a un nivel de amortización y rentabilidad lo antes posible para el buen funcionamiento de una granja. Por ejemplo, hablamos de 1,5 a 2 años aproximadamente que podemos tardar en amortizar y obtener rentabilidad de lo invertido en una cordera, según las producciones medias que tengan en cada granja. Por lo tanto, se puede decir que a partir de su segunda lactación puede estar amortizada y, por tanto, comenzar a obtener la rentabilidad esperada. Si no se tiene un objetivo y una planificación de lo que hay que hacer, no conseguiremos obtener en ese periodo de tiempo la rentabilidad esperada.
En este sentido, ¿cuáles son las tendencias de futuro en el manejo reproductivo?
Yo soy de los que digo que las tendencias a futuro son más sencillas de lo que se piensa, ya que a día de hoy es un gran reto tener una buena planificación reproductiva y tener unos objetivos marcados para conseguir año a año. La estacionalidad en la producción de leche que muestran los datos del MAPA en este sector nos indica que la mayoría de las granjas a día de hoy no tienen instaurado este punto que hemos mencionado anteriormente, ya que la mayor producción de leche se produce en primavera, que por naturaleza es la época reproductiva de las ovejas. Esto quiere decir que no hay una planificación reproductiva adecuada y en consecuencia un buen manejo de la reproducción. A futuro, el gran problema que va a tener la ganadería es la mano de obra, por tanto, tenemos que buscar los tratamientos y la tecnología que nos permita simplificar, ordenar y manejar grandes número de animales con la mayor eficiencia posible, menor carga de trabajo físico y rutinario posible. En este formato los tratamientos de melatonina cumplen con las condiciones expuestas anteriormente. Por otro lado, debemos avanzar y dar el salto con la transferencia de embriones, que nos ayudará a avanzar.
En el seminario se tratará la problemática del estrés térmico. ¿Como afecta la temperatura exterior e interior en una explotación de ovino de leche?
Es un aspecto que se analizará profundamente en el FORO OVINO y que será muy interesante para todos los asistentes. Los cambios de temperatura, humedad y otras variables meteorológicas son factores que afectan a la producción animal y a la reproducción en los pequeños rumiantes, algo que pocas veces se ha tenido en cuenta. Y mucho menos se ha medido al nivel que lo está haciendo el grupo TechCARE.
¿Qué aspectos se presentarán sobre el proyecto TechCARE? ¿Qué resultados se han obtenido?
El proyecto se basa en el desarrollo y validación de herramientas innovadoras de la ganadería de precisión (GdP) para la valoración eficiente de los indicadores de bienestar basados en el animal (IBBA) y las sistemas de alerta temprana (SAT) que permitan la identificación objetiva y temprana de problemas de bienestar, para que así puedan incluirse en los modelos de gestión del bienestar en todas las etapas de la producción de pequeños rumiantes (ovino de carne, ovino de leche y caprino de leche) y a lo largo de su cadena de valor. Se comentarán resultados obtenidos de la investigación que se está haciendo en las granjas de pequeños rumiantes con nuevas tecnologías.
Por otro lado, se presentará la gestión integral en una explotación de un censo elevado como SAT Genovi. ¿Qué aspectos deben tenerse en cuenta en esa gestión integral?
Después de diez años en este sector, y después de visitar año a año mil tipos diferentes de granjas por toda la geografía española, creo que hoy en día no tengo la experiencia ni la respuesta perfecta para responder a esta pregunta. Creo que estamos acostumbrados a ver un modelo de granja donde el propietario es el trabajador principal de la granja, donde todo podemos decir que fluye y funciona ‘de una manera sencilla’ con todas las dificultades e imprevistos que surgen en el diario de una granja. Cuando entras a visitar este tipo de granjas, tes das cuenta de la complejidad que supone el quehacer diario, todas las complicaciones que podemos encontrarnos en una granja de censo medio o estandar, en estas granjas se ve multiplicado por 100. Pensemos que este tipo de granja supera los 50 trabajadores, sólo en tema de recursos humanos es brutal… y creo que en este tipo de granjas debe ser fundamental y prioritario desarrollar y trabajar este punto del personal. Ceva está poniendo en marcha una colaboración con una empresa externa experta en recursos humanos en ganadería, una colaboración para atender este tipo de necesidades que entiendo que tiene hoy en día el sector. Se ha empezado en granjas de vacuno de leche y este año queremos empezar a trabajarlo en granjas de pequeños rumiantes donde el número de trabajadores es muy elevado. El gran problema que estamos teniendo en este sector, y en la ganadería en general, es el de la mano de obra y pienso que es una cuestión prioritaria que se debe abordar desde todas las organizaciones, administraciones públicas y privadas. El resto de los aspectos que deben tenerse en cuenta creo que son los mismos que una granja media, pero por supuesto a grandes escalas.
¿En qué aspectos debe prestarse especial atención para una granja de ovino de leche con un elevado censo de animales?
Creo que el principal aspecto ya se ha mencionado: recursos humanos. Todo ello seguido de un buen trabajo de planificación y aprovisionamiento de materias primas para garantizar el funcionamiento de la granja, ya que la alimentación en este tipo de granja mueve unos volúmenes de materias primas impensables. En tercer lugar, un buen plan reproductivo seguido y, por supuesto no menos importante, de un buen plan sanitario, fundamental para la prevención de posibles enfermedades que provoquen un problema sanitario grave.
¿Cuál es el modelo ideal de reproducción?
El modelo ideal reproductivo no existe. Este va a depender de la capacidad de la granja para atender el trabajo que genera dicho modelo, de instalaciones disponibles para el número de animales que disponga la granja en cada estado productivo, así como muy dependiente de la mano de obra y, sobre todo, de la capacidad de ordeño de su instalación. Juntando todos estos puntos debemos elegir el modelo reproductivo de la granja.
¿Cuáles son las prioridades sanitarias?
Hoy en día las prioridades sanitarias en este tipo de granjas, y desde mi punto de vista en todas, es abordar las enfermedades que más pérdidas nos ocasionan en las granjas. Creo que en primer lugar están las patologías abortivas, seguidas de las patologías que afectan a la ubre, sin olvidar los problemas respiratorios y septicemias por clostridiales. Tampoco podemos olvidar en la ganadería intensiva un buen plan antiparasitario donde se pueda hacer un manejo de rebaño completo para reducir la carga y excreción de huevos o larvas parasitarias que puedan volver a infectar a los animales; sin olvidar las parasitosis externas que cada vez son más frecuentes en granjas intensivas, como puede ser la sarna.