El sector ovino se encuentra en un contexto favorable para el desarrollo de la ganadería de precisión, debido al uso generalizado de la identificación electrónica individual y a la expansión de nuevas tecnologías en el sector. Sin embargo, solo el 38% de las granjas están equipadas con herramientas que maximizan los beneficios de la identificación electrónica individual. En general, las granjas de ovino lechero están mejor equipadas que las de carne.
Son datos de una encuesta realizada en el contexto del proyecto SheepNet, en el que se ha evaluado la percepción de los ganaderos de ovino sobre la identificación electrónica individual y en el que han participado ganaderos de varios países europeos, como es el caso de Francia, Reino Unido, Irlanda, España, Italia, Rumanía, Turquía y Hungría. Se recogieron un total de 1.148 encuestas, de las cuales casi el 75% procedían de Francia o Irlanda, y la mayoría eran ganaderos de ovino de carne.
El nivel de equipamiento de las granjas depende del tamaño de los rebaños, con casi el 75% de los rebaños con más de 500 ovejas equipadas. El coste de los equipos es la principal barrera para su incorporación en las ganaderías de ovino. Estos dos aspectos muestran una falta de percepción favorable de la relación entre coste y beneficio durante la inversión.
Hasta la fecha, los beneficios de la identificación electrónica siguen limitados al manejo de los movimientos de animales, sin extraer todas las potencialidades que tiene este sistema.
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