El Principado de Asturias estudia la razón por la que han muerto varias ovejas por lengua azul después de haber sido vacunadas contra la enfermedad. Belén Fernández, consejera de Medio Ambiente y Desarrollo Rural, ha confirmado la muerte de varias ovejas que ya habían sido vacunadas de lengua azul en explotaciones de concejos del oriente de Asturias y ha pedido la “complicidad” de los ganaderos para seguir desinfectando las cuadras y vacunando a los animales. Además, ha asegurado que “existen evidencias de estas muertes” en animales vacunados, pero también “síntomas de recuperación de la cabaña” gracias a la inmunización.
De esta forma, Fernández ha revelado que la Consejería se mantiene en contacto con el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, cuyo personal de laboratorio se desplazó el martes a explotaciones asturianas para una toma de muestras de la que se espera tener los resultados la próxima semana. También se ha desplazado el personal del laboratorio que fabricó la vacuna. “De momento vacunar y desinfectar son las únicas medidas que se han revelado útiles”, ha dicho. Algunas causas que se barajan en el sector asturiano para explicar las muertes son que el serotipo 1 de la lengua azul se ha vuelto más resistente a la vacuna, un posible fallo del laboratorio encargado de fabricar la vacuna, así como un error en el transporte.
Por último, Fernández ha asegurado que el laboratorio animal de Jove, en Gijón, ha ralentizado su actividad por un virus que afectó a los equipos pero ha insistido en que ha recobrado la normalidad y “ni está parado ahora ni lo ha estado nunca”.